sábado, 26 de noviembre de 2011

DESFILE DE LAS MIL POLLERAS EN LAS TABLAS 2011

Selma
Mañana 27 de noviembre de 2011, la ciudad de Las Tablas se viste de fiesta, para acoger a una gran cantidad de connacionales que participarán del Desfile de las Mil Polleras.  Es uno de los pocos días al año en que la población tableña se multiplica del mismo modo que lo hace para sus ya célebres carnavales.
 Así que mientras se inicia el desfile, te invito a compartir el siguiente poema de Ana Isabel Illueca:

MI POLLERA
      Ana Isabel Illueca


Ayleen
 
 
No me pidas
ni sedas ni gasas
para ornar esta noche
mi talle...
noche de carnaval...
¿Qué panameña
reemplaza su pollera
por un traje?...



Ayleen
Mi pollera!...
Tú sabes,
yo la hice
con delgados olanes,
donde el encaje
a punto de "mundillo"
una abuela
tejió con manos hábiles;
y luego a los arrullos
de la tarde,
con la aguja enhebrada
en tonos suaves,
marcamos
en la blusa y en la enagua,
las hojas y la flor
de los maizales.







Vielka
Tú no sabes
la gracia que ella pone
cuando ciñe mi talle
ni el rubor
que se siente en las espaldas
al roce del encaje
que recogen
los hilos de la lana
en bombas circulares.















Ligia Helena


Ni has visto mis zapatos:
estuchitos de raso
que cobijan
mis pies chicos y ágiles
cual los de las mujeres tropicales.











Ligia, Ayleen, Selma
Mi cabeza es la noche:
en ella cual estrellas,
titilan los tembleques luminosos
desde el negro
azabache de mis trenzas
que sujetan,
dobladas en la nuca
las doradas peinetas.
Y frente a las orejas,
como dos rosas blancas,
asoman las "mosquetas"
que engalanan la cara;
mientras al cuello penden
el rosario de perlas
o el collar
de escuditos coronados
de épocas añejas...
cuando el oro

corría como fuente
por las colonias
plenas de leyendas...



Selma
Deja que me atavíe
con mi hermosa pollera;
y que vaya
a cantarte una tonada
allá en la rueda
donde se oyen "pujar"
los "tamboritos"
y la "caja" parlera
que recuerda,
en su rítmico sonido,
los cholos asoleados de mi tierra;
y mientras palmotean
y corean mi canto las morenas,
yo saldré
con el mozo más fornido
al centro de la rueda,
a bailar
la tonada más sentida
de mi patria pequeña;
y al ritmo
de los aires nacionales
de la tierruca istmeña,
mientras hacen
mis pies mil filigranas
al son de sus cadencias,
se abrirá cual dos alas,
mi pollera
que desquite con garbo
la lluvia de sombreros

y monedas.




No me pidas
que cambie mi vestuario
    por gasas ni por sedas.
    Ninguna panameña
     cambiaría

     por nada, su pollera.

2 comentarios:

Powered By Blogger